El reencuentro.

Al día siguiente fuimos a buscar otra vez a los amigos de Sonic con un reloj rastreador que él tenía.
- ¿Qué tal? ¿Consigues rastrear su señal?
- No, no encuentro su señal…
Mientras tanto con el grupo de los amigos de Sonic…
- Chicos, he modificado este rastreador para que tenga más alcance y según el rastreador, Sonic está a unos diez kilómetros de aquí hacia el noreste.
- Bien Tails, sigamos buscando…
Después de un rato…
- ¿Falta mucho? Cheese y yo estamos agotados y me duele la pierna.
- Chaooo…
- Tails, ¿Qué tal si yo me quedo aquí con Cream y Cheese para descansar y vosotros seguís buscando a Sonic?
- Sí, Tails, es una buena idea…
- Vale, quedaros aquí y cojed este reloj, así, en caso de que no os encontremos os podremos buscar con el rastreador.
- Vale.
Entonces, Tails, Silver y Knuckles siguieron buscando a Sonic mientras Blaze, Cream y Cheese descansaban.
En un momento el rastreador de Sonic empezó a pitar.
- Sonic, ¿por qué pita?
- Mis amigos están cerca, por el suroeste, ¡Vamos!
- Sonic está por aquí cerca, ¡Mirad bien!
- ¡TAILS! ¡KNUCKLES! ¡SILVER!
- ¡SONIC! – dijeron los tres a coro.
Entonces Sonic fue corriendo a donde estaban ellos y yo le seguí.
- Sonic te estuvimos buscando por todas partes, ¿Dónde estabas?
- Estaba con ella, me ha explicado que la gente de aquí no son muy amables con seres que vengan de otro planeta, así que, nos hospedaremos en su casa.
- Muy bien, ¿cómo te llamas?
- Me llamo Amy.
- Encantado de conocerte, Amy.
- Igualmente.
- Yo me llamo Tails y ellos son Silver…
- Encantado.
- Y Knuckles.
- Mucho gusto.
- Encantada de conoceros.
- Tails, ¿Dónde están los demás?
- Blaze, Cream y Cheese están por aquí cerca, se han quedado descansando porque Cream se había hecho daño en la pierna.
- Bueno, vamos a buscarlas.
- Sí.
Entonces empezamos a buscarlas con el rastreador hasta que las encontramos.
- Blaze, ¿Cómo está Cream?
- Tiene la pierna rota, dejémosla descansar…
- De acuerdo.
- Voy a llamar a mi manager para que nos mande una limusina.
- Vale, gracias por tu ayuda, Amy.
- De nada.
Entonces llamé a mi manager y poco después ya estaba la limusina.
- Venga, subid.
- Knuckles, trae a Cream.
- De acuerdo. – Knuckles cogió a Cream en brazos y la subió a la limusina mientras Cheese le seguía.
- Muy bien, ¿Ya estamos todos?
- Sí.
- Pues venga, vamos a casa.
 En el trayecto, que era algo largo ya que nos alejamos bastante de mi casa, Knuckles se quedó dormido con Cream en sus brazos y Cheese en su cabeza.
- *Risa silenciosa*
- ¿Qué pasa? ¿Por qué te ríes?
- Shhh… Mira a Knuckles y a Cream… Son adorables… - Dije susurrando.
- (Sí que lo son) *Risa silenciosa*
Llegamos a mi casa y todos miramos a Knuckles y a Cream y luego les despertamos
- Mmm… ¿Qué pasa?
- *Bostezo* ¿Ya hemos…?
Entonces se levantaron los dos sobresaltados y Cream se cayó.
- AY…
- Oh… ¿Estás bien? – Knuckles corrió hacia Cream para ayudarla a levantarse.
- Sí, gracias por ayudarme…
- No es nada… No creo que puedas caminar, tienes la pierna rota, yo te llevaré – Le dijo con una leve sonrisa y cogiéndola en brazos.
- Vale… Gracias… - Cream se puso muy roja.
Después de eso todos caminamos en silencio hacia mi casa.
- Bueno… Ya estamos aquí… Poneos cómodos en el salón mientras acompaño a Knuckles a la habitación de Cream para que ella pueda descansar.
- Vale.
- Ven Knuckles, por aquí…
Entonces fuimos a una de las habitaciones de mi casa.
- Pon a Cream en la cama, he llamado a un médico, en unos minutos estará aquí para ver la pierna de Cream. Tú mientras tanto duerme, Cream.
- De acuerdo, gracias por la hospitalidad.
- No es nada – le dije con una gran sonrisa.
- Quédate aquí y descansa – le dijo mientras la dejaba en la cama – Yo me voy abajo con los demás.
- Voy contigo. Cream, si necesitas algo mi mayordomo se quedará cerca, solo dile lo que necesitas, ¿Vale?
- Vale.
Knuckles y yo bajamos con los demás y nos quedamos hablando hasta tarde. El médico le puso una escayola a Cream y al final de la noche le mostré a cada uno su habitación y nos fuimos a dormir.


Continuará…